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La mamoplastia de aumento o aumento de pecho, sigue siendo la cirugía mamaria más solicitada.
Una cirugía de aumento de pecho no solo permite aumentar el tamaño del pecho, sino también mejora su aspecto y ayuda acorregir algunas asimetrías. El procedimiento consiste en la implantación de unas prótesis o implantes.
Las características del implante, forma, tamaño, proporciones, su localización, etc. pueden variar dependiendo de lo que el paciente esté buscando y de lo que el cirujano proponga, pero siempre con un objetivo, aumentar su tamaño, realzar el busto y mejorar su aspecto; buscando siempre la naturalidad, la armonía y el equilibrio de proporciones.
La indicación de la mamoplastia de aumento es sencilla, toda mujer que considere pequeño el tamaño de su pecho es candidata a una cirugía de aumento mamario. También son candidatas aquellas pacientes que observan una asimetría mamaria (tamaño/forma). La asimetría mamaria es un hallazgo frecuente, no lo es tanto el hecho que sea claramente visible la diferencia de tamaño de una mama respecto a la otra. En estos casos la cirugía de aumento mamario es una alternativa, ya sea implantando prótesis sólo en un lado o, mucho más frecuente, la implantación de prótesis de diferente tamaño en uno y otro lado.
El denominador común que debe tener el pecho para ser un firme candidato a la mamoplastia de aumento es que mantenga su posición y no esté caído.
Durante la entrevista con el cirujano, éste analizará tanto su pecho como su tórax para evaluar las características y la relación que entre ellos se genera.
Debemos entender que el pecho no es una estructura independiente ni aislada. El pecho forma parte del conjunto de estructuras torácicas e interactúa con ellas; descansa sobre la parrilla costal por lo que cualquier alteración que se pueda presentar sobre ella (escoliosis, tórax en quilla, Sindrome de Poland…) puede condicionar la situación de partida, la planificación quirúrgica y/o el resultado potencial.
Por lo tanto, se realizará un minucioso análisis de todos esos factores, se contrastará con los deseos y se discutirán las posibles alternativas y se tomará la decisión más apropiada para conseguir el mejor resultado.
Muchas mujeres plantean dudas sobre la posibilidad de someterse a una cirugía de aumento de pecho cuando existen antecedentes familiares de patología mamaria (cancer de mama). En estos casos, no existe contraindicación alguna para la cirugía de aumento de pecho, únicamente es necesario un mayor control y seguimiento de la mama pero no implica ningún incremento del riesgo de patología mamaria.
El objetivo de la cirugía es la colocación de un implante de Gel Cohesivo de Silicona que permita aportar a la mama el volumen necesario para obtener el tamaño deseado.
Existen varias vías de abordaje o vías por las que colocar la prótesis:
La elección de una u otra dependerá de varios factores que el cirujano analizará durante la visita de reconocimiento. Una vez analizadas todas las variantes, el cirujano podrá indicar cual es la más apropiada para cada caso concreto.
También existen diferentes tipos de implantes, anatómicos y redondos, distintos tamaños, proyecciones y texturas, etc. Cada implante tiene sus particularidades y repercusión sobre la morfología de la mama y, por consiguiente, sobre el resultado que obtendremos. Tu cirujano te aconsejará sobre la más indicada y te explicará el porqué de la indicación.
Por último, indicar que los implantes de ultima generación no tiene una indicación expresa de recambio cada cierto tiempo. Lo que si debemos hacer es controlarlos; para ello, el Dr. Triviño recomienda una ecografía de control a partir del octavo año de la intervención y cada dos años. Si se evidencian indicios de deterioro o daño, estaría indicado el recambio; mientras no se evidencie alteración, no hay necesidad de cambiarlas.
El objetivo de la cirugía es obtener un busto natural, armónico, equilibrado, etc, con el que la mujer se sienta a gusto e identificada; un pecho elegante. Cada mujer tiene sus proporciones, sus gustos y sus deseos por lo que no hay una cirugía estándar, hay que decidir cual es la que cada mujer necesita.
Dependiendo de la vía de abordaje empleada, la duración media de la intervención de 45 minutos a hora y media.
La anestesia general es la que mayor grado de confort y seguridad ofrece a la paciente. Ninguna de las otras opciones anestésicas ofrece ventaja alguna sobre la anestesia general.
Paralelamente, se anestesiará la zona con anestésico local con la intención de minimizar las molestias postquirúrgicas.
Se recomienda una noche de ingreso hospitalario, pudiéndose dar el alta con total normalidad al día siguiente de la intervención
Lo más habitual es que el implante sea colocado debajo del músculo pectoral. Ello puede ocasionar alguna molestia añadida. Durante los primeros días es normal que se sientan molestias e inflamación pero, todo ello, al igual que los morados que puedan aparecer, se resuelven en gran parte a lo largo de la primera semana por lo que, en 7-10 días la paciente puede hacer, con ciertas limitaciones, una vida prácticamente normal.La incorporación al trabajo dependerá de las particularidades de la paciente y de la actividad laboral que desempeñe.
Durante el primer mes es fundamental llevar cualquier sujetador sin aro, con el que sienta cómoda, pudiendo cambiarlo siempre que sea por otro de iguales características. Es muy posible que también se le indique la necesidad de llevar una banda mamaria que asegure la estabilidad del pecho intervenido.
Resultan muy útiles los masajes de drenaje linfático y tratamientos terapéuticos postquirúrgicos.
Transcurrido el mes de la intervención la paciente puede retomar, en la mayoría de los casos, la actividad deportiva. No obstante, se considera que el proceso global se prolongará más allá de los seis meses.
Contamos con un excepcional equipo humano de profesionales con una sólida trayectoria.
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